viernes, 25 de enero de 2008

KM 7616: BOBO-DIOULASSO

19-1-2008: BAMAKO-FANA (145 km)

Mirando el mapa parece que hay dos opciones para llegar a Fana. Una pasa por Koulikoro, ciudad grande a la orilla del río Niger, a 60 km de Bamako, y la otra va mas directa. Mi plan al principio del día era llegar hasta Koulikoro, empezando con una distancia corta después de tres días de descanso, y continuar mañana hacia Fana. Pero al llegar a Koulikoro y mirar mejor el mapa descrubro que por aquí no es tan fácil llegar a Fana. En primer lugar porque Fana queda al sur del río, y yo estoy al norte.
No hay opción, hay que cruzar el río, y los grandes puentes para hacerlo están en Bamako. Me acerco pues al río a preguntar como es que se cruza y un tipo con un trozo de madera al que le había dado el nombre de barco me hace la oferta de cruzarme con la bici por 500 CFA (unos 80 céntimos de euro). Solo había ido a preguntar pero acabé montándome (y aún no se muy bien porqué). Supongo que no podía esperar hasta mañana para saber que se siente en un romántico paseo en "pirogue", balanceandome armoniosamente (o al borde de la flotación) a cada golpe de remo.
Al mismo tiempo que llegaba a la otra orilla la realidad, seca como la tierra de la pista que me esperaba recorrer, me golpeo sin miramientos, despertándome del sueño idílico en que me había sumido el paseo (o pesadilla al borde del pánico a tener que buscar mi bici en el fondo del Níger, según se mire).
25 kilómetros de tierra hasta la carretera principal (la otra opción desde Bamako (más corta y mejor)), que empecé a recorrer con la amarga sensación de haber errado en la elección del camino más conveniente. Como castigo me impuse llegar a Fana (a 145 km) en un solo día, aunque tubiera que llegar de noche, cosa que no pasó.

En mi habitación en Fana dispongo de un baño con una ducha muy espaciosa, así que aprovecho para ducharme con la bici incluida. Estaba llena de polvo y tierra de las últimas pistas cruzadas y después de esto ha rejuvenecido 3000 km y ciertos ruidos que empezaban a preocuparme han cesado.

20-1-2008: FANA-SEGOU (116 km)

En este día pago los excesos del día anterior.



21-1-2008: SEGOU-BLA (90 km)

En Bla no hay hoteles, pero me permiten quedarme en La casa de los Antiguos Combatientes de Mali.
Uno de los antiguos combatientes (que andaba por allí como por su casa) se acercó a contarme batallitas de su viaje hasta Argelia para luchar del lado del ejercito francés. Y el vigilante del lugar se dedicó a mostrarme orgulloso fotos suyas de cuando consiguió en cinturón negro en Tae-Kondo. Pero no me aclaró si el cinturón negro para un negro es lo mismo que el blanco para un blanco.
La verdad es que ahora es un buen momento para mezclarse con la gente con la escusa perfecta. Ayer empezó la CAN (Copa de África de Naciones de fútbol, que se juega en Ghana) y cada vez que empieza un partido los hombres se agrupan en torno a cualquiera de las televisiones que hay en los comercios de la calle. Vayas donde vayas hay televisiones colocadas en una mesa o en un estante y un corrillo de gente alrededor. ¿Se puede ver el partido?..."claro,siéntate".

El partido más esperado del día:  Mali 1 - Benin 0....¡Fiesta!

22-1-2008: BLA-KOUTIALA (80 km)

Durante los últimos dos días me he comido el Harmattan de frente. El Harmattan es el viento que viene del desierto, y que por cierto viene bien frío. Esto y el cansancio que arrastro desde el día de los 145 km me obliga a darme un día de descanso para reponerme antes de meterme en Burkina Faso.

Aquí encuentro en medio del bullicio del mercado a Raymond, un francés que se ha fijado como objetivo llegar a ser el francés (actual) que mas países ha recorrido .Este es su noveno viaje, y abarca todos los países de África Occidental. En total ha visitado alrededor de 260.
La mala noticia es que ha intentado por todos los medios conseguir el visado de Nigeria pero no lo ha conseguido. Lo ha solicitado en embajadas de Nigeria de 4 países distintos y también en la misma frontera, y en todos los sitios se la han denegado. Yo tengo que pasar por Nigeria tarde o temprano por narices si quiero continuar hacia el sur, así que es un detalle a considerar. De momento Raymond dice: "buena suerte con el visado de Nigeria".

24-1-2008: KOUTIALA-kOUNDOUGOU (165 km)

Hoy es uno de esos días en que todo sale mejor de lo que se espera. Estaba un poco preocupado porque había decidido no pagar en visado de Mali en Bamako (que son unos 25 euros y es obligatorio) y jugármela haciéndome el tonto en la frontera a la hora de salir. No es el mejor plan, porque puede ocurrir cualquier cosa, desde que me envíen de vuelta a Bamako para hecerme el visado, hasta abusar de la situación y pedirme algún tipo de regalo a cambio de solucionar mi problema. Claro que si algo es seguro es que los policías de las fronteras gustan de abusar de su situación de poder pero no de su inteligencia, y por supuesto, nadie notó que no tenía en regla el visado y salí del país con una maliciosa sonrisa de satisfacción y 15000 CFA en el bolsillo.

Como no había ningún pueblo importante en este lado de Burkina Faso sabía que no encontraría hotel, así que me planteé pedalear hasta el final de mis fuerzas...y eso ocurrió en Koundougou, a 165km del principio (lo cual es un record para mi). Me invitaron a dormir en el ayuntamiento, en la habitación de al lado de la del alcalde del pueblo.

El ayuntamiento de Koundougou


Esa noche, mientras escuchábamos en la radio el partido entre Senegal y Guinea una mujer llegó con un plato de ensalada y media barra de pan y lo dejó junto a mis pies. El alcalde había encargado esa comida para mi, ya que pensaba que a un blanco no le gustaría la comida que ellos iban a comer.
No se puede pedir más para el primer día en este país.

25-1-2008: KOUNDOUGOU-BOBO DIOULASSO (82 km)

Como me pasó al salir de Bamako, los demasiados kilómetros de ayer me han exprimido, y la ensalada de anoche no tenía suficiente aliño como para reponer por completo la energía perdida. Por suerte la distancia hoy no ha sido demasiado grande.
De todas formas Bobo-Diouilasso parece bastante interesante a primera vista, así que aprovecho esto para quedarme a disfrutar la ciudad y descansar....¡y después hacia la capital!

El mercado central

La catedral...
y la mezquita

viernes, 18 de enero de 2008

KM 6938:BAMAKO

LABE-DALABA-TIMBO-DABOLA-SARAYA-NOURA-SIGUIRI-NARENA-BAMAKO (834 km en 8 dias)

Después de Labe todo resultó mucho mas fácil, con carretera las montañas se llevan mejor, y casi cada día encontramos un pueblo con alojamiento por apenas un par de euros cada uno (Guinea Conakry es el país mas barato de todos hasta el momento). Además Marcin se puso en forma al fin y pudimos mantener un ritmo de más de 100 kilómetros por día sin tener que volver a parar a descansar.
Como curiosidad decir que en Timbo no encontramos alojamiento pero fuimos invitados a dormir en la escuela, y que el director en persona me ayudó a cambiar la recámara de la bici. Y en Narena, ya en Mali, dormimos en un centro de formación cuando ya planeábamos alejarnos unos kilómetros y montar la tienda.
Camino a Bamako
Un día después de entrar en Mali llegamos a Bamako, y aquí es donde he pasado los últimos tres días, descansando, buscando repuestos para la bici (por cierto sin éxito, y esto va a ser un problema en breve) y aprovechando las ventajas de una gran ciudad.
Mañana continuo dirección Burkina Faso, pero solo, porque Marcin ha terminado en Bamako su ruta, y ya ha vendido su medio bicicleta, que siguió perdiendo piezas por el camino desde Labe.

¡Os mando un saludo a todos desde Mali!

Transporte público

Mercado

jueves, 17 de enero de 2008

KM 6104: LABE

1-1-2008: BAFATA-GABU (55 km)

El tamaño de la resaca del día uno fue proporcional al éxito de la fiesta de noche vieja, así que no me supuso un gran problema levantarme temprano y preparar todo para continuar el viaje hacia Gabu (¡la tercera ciudad mas grande de Guinea Bissao!).
La noche vieja fue un fracaso por dos razones. Primero porque la botella de alcohol que había traido Marcin para la ocasión desde la isla de Bubaque (al sur de Bissao) nos la bebimos la noche del 30, y segundo porque en lugar de preparar la fiesta dedicamos la tarde del 31 a recorrer las tiendas de Bafata en busca de la bicicleta menos mala de la ciudad. De algún modo Marcin creyó mis mentiras y se tragó que la mejor manera de llegar a Bamako (a 1300 km de distancia) era pedaleando.
Así que año nuevo compañero de bici nuevo.
La primera cosa que aprendimos en el nuevo año es que la bicicleta menos mala de Bafata habría hecho mejor quedándose en Bafata. Marcin pinchó tres veces durante los primeros 7 kilómetros de recorrido porque los radios de la rueda de atrás habían sido apretados en exceso y presionaban la recámara. La solución que encontramos fue cubrir de cinta aislante el interior de la llanta y aflojar de forma provisional los radios que peor estaban, de modo que Marcin pudiese llegar hasta Gabu (con la rueda de atrás haciendo eses)

2-1-2008: GABU-KOUNDARA (113 km)

Desde Gabu hasta la frontera de Guinea Bissao con Guinea Conakry la carretera parece una broma pesada. Hay un millón de agujeros que nos obligan a zigzagear y frenar cada pocos segundos durante unos 80 kilómetros. Al llegar a Guinea Conakry la cosa cambia a peor, la carretera de los agujeros se transforma en una pista con tramos de arena en los que no queda mas remedio que bajarse de la bici a empujar.
Durante este día la bici de Marcin se portó relativamente bien, y solo se le puede reprochar que se le partieran los dos pedales a unos 20 kilómetros del final.
A Koundara Marcin llego destrozado, al igual que su bici, así que decidimos quedarnos un día para reparar daños y recuperar fuerzas, pues intuíamos que los próximos días serian los mas difíciles.




4, 5, 6-1-2008: KOUNDARA-LABE (262 km en 3 dias)

Uno de los tramos mas difíciles desde que empecé el viaje en Valencia. Nada de carretera en todo el recorrido, montañas que nos hacen subir y bajar sin descanso, apenas sitios donde conseguir comida y nubes de polvo que nos regala cada coche o camión que pasa a nuestro lado. Está claro que Marcin no ha elegido ni la mejor bici ni el mejor momento para unirse al viaje.
El primer día conseguimos llegar de noche a un pequeño pueblo que hay sobre la pista a la altura del cruce de Goual. Allí preguntando encontré a un hombre que nos ofreció una de las habitaciones de su casa para colocar nuestras esterillas y dormir.
El segundo día, tras completar la distancia mínima que habíamos acordado me quedé junto a la pista para esperar a Marcin. Empezaba a oscurecer así que monté la tienda de campaña y empecé a juntar algo de leña para hacer un fuego y preparar una sopa, pero Marcin no llegaba. Esperando conocí a unos jóvenes que me dijeron que no tenía que dormir en la tienda, que podía ir con ellos a su poblado, "el poblado de un Imán". Les dije que debía esperar junto a la pista la llegada de mi amigo, así que se quedaron a esperar conmigo. La oscuridad se hizo total, y cuando yo ya empezaba a temerme lo peor llegó un gran camión levantando una gran nube de polvo con Marcin y su bicicleta arriba del remolque. Marcin me contó que había sido derrotado por las montañas y que en un momento dado se tumbó junto a la pista para dormir, pues no podía seguir un kilómetro más, pero que al escuchar la llegada del camión usó sus últimas fuerzas para hacerse ver y pedir ayuda.
Una vez en el poblado del Imán fuimos llevados a una habitación donde el jefe del lugar se hayaba reunido resolviendo ciertos asuntos. Nos mandaron sentar y esperar. El jefe del poblado se mostró indiferente ante nuestra presencia y en algún momento ordenó que se nos proporcionase alojamiento y café (llegamos tarde y la comida se les había acabado). Esto se hizo al instante, para nuestro alivio, pues estábamos apunto de quedar dormidos allí mismo, ante el jefe del poblado.


Al día siguiente yo salí disparado como una flecha para terminar cuanto antes con este tramo tan difícil, necesitaba llegar cuanto antes a Labe y descansar. El recorrido fue de casi 80 kilómetros y aun mas difícil que el día anterior, así que a medida que avanzaba entre las montañas me convencía de que Marcin no sería capaz de llegar en un solo día....Cuando llegué a Labe mi cuerpo, mi equipaje y mi bici estábamos completamente cubiertos de polvo de la pista. Mis labios agrietados y la piel de mi cara y manos irritada por el sudor y el polvo. Mi imagen en el espejo me impactó, pero ya estaba hecho.
En cuanto a Marcin completó unos 25 kilómetros hasta que el portaequipajes de su bici se partió por la mitad, momento en que paró un camión y se dejó llevar.
¡Esto es lo que yo llamo vacaciones!

lunes, 7 de enero de 2008

KM 5600: BAFATA

20, 21, 22, 23: ZINGUINCHOR-CAP SKIRRING-ZINGUINCHOR (140 km)

Largo rodeo innecesario. Razón: última visita a la playa en unos cuantos miles de kilómetros. Y fue buena idea. Las playas muy bonitas, en un ambiente muy relajado y con buena compañía. Ha valido la pena hacer los 140 km extra, he disfrutado los paisajes. Por cierto, esta es la primera vez que celebro el Tabasqui (Definición de Tabasqui: miles de musulmanes asesinando corderos y posterior comilona sin freno).
Paisajes de la Casamance



24-12-2007: ZINGUINCHOR-SAO DOMINGOS (26 km)
A veces la bicicleta es el mejor medio de transporte para moverse en África. Marcin (mi amigo polaco que conocí en Dakar y reencuentro aquí) y yo salimos del hotel al mismo tiempo, él para buscar un taxi y yo para empezar a pedalear, los dos hacia Sao Domingos, el primer pueblo de Guinea Bissao. Pues bien, una vez allí tube que esperarle mas de una hora y media. Por suerte yo no tengo que discutir precios y soportar tortuosas posturas durante horas cada vez que quiero cambiar de sitio.

Con respecto a Senegal, sobretodo con respecto al norte de Senegal y a La Gambia, Guinea Bissao es un lugar muy cómodo y tranquilo para mi. En la carretera la gente sigue diciéndome ¡BRANCO!(ahora en portugués), pero en los pueblos nadie me molesta. A veces se extrañan al verme o como mucho me saludan (o se ríen), pero eso es todo. Gracias a la ausencia de turismo la gente todavía no ha aprendido a asociar a un blanco con una oportunidad de conseguir dinero, y eso se agradece.
De hecho, en Senegal, uno acaba un poco harto de ser un blanco, porque cuando empiezas una conversación con cualquiera sabes que tarde o temprano esa persona va a intentar venderte alguna cosa o va a pedirte que le regales dinero o la bici...y eso te hace sentir como un cajero automático ambulante.
Aquí es diferente, si alguien habla contigo es porque se interesa por ti, y si necesitas ayuda de algún tipo, por ejemplo al reparar un pinchazo, enseguida hay alguien que se acerca y emplea su tiempo contigo sin esperar nada a cambio.
En cuanto a la carretera es perfecta para la bici, la mayor parte esta bien conservada y casi solo es utilizada por bicicletas. Así que paseo tranquilo rodeado de un jardín constante rebasando una a una las casas donde las mujeres lavan la ropa contra las piedras, preparan el fuego o cargan bultos en sus cabezas, los hombres hacen nada y los niños gritan ¡BRANCO!

25-12-2007: SAO DOMINGO-BISSAO (127 km)

Hoy la ruta ha pasado a través de dos ríos. En el primero, mientras esperaba al ferry para cruzarlo (porque no hay puente), un policía me ha pedido que le regale la bici, que le sería muy útil para venir a trabajar cada día desde Bissao. En el segund o(este con puente), otro policía me ha mandado parar para pedirme dinero. "Dinero porque es navidad" (estos policías parecen de Senegal).
Lo mejor es hacer ver que no te tomas en serio su demanda, de este modo no insisten demasiado y te mandan continuar.
También me he cruzado con algún que otro militar sin mucho que hacer y que me pedía parar para charlar. Con estos directamente hago oídos sordos y sigo mi camino.

Bissao tiene dos centros, el típicamente africano con todo el movimiento, el comercio, el caos, el trafico sin control, basura, falta de espacio...y el antiguo centro colonial de la ciudad, con anchas y espaciosas calles, grandes y bonitas casas de colores, amplios balcones, plazas, monumentos...pero practicamente todo en ruinas.
Esta ciudad podría ser preciosa si alguien ocupara y rehabilitara las casas del centro.
Y si algo funcionara. Aquí la electricidad y el agua corriente son productos de lujo, el suministro es intermitente en los mejores hoteles, y fuera de ellos es demasiado pedir., así que toca usar linternas en el cuarto y lavarse con cubos.

Un Bissao
El otro Bissao






28-12-2007: BISSAO-MANSOA (63 km)

Al llegar a Mansoa, después de otro tranquilo y agradable paseo entre las montañas de tierra que construyen las hormigas (algunas mas altas que una casa), encontré a un grupo de jóvenes sentados en la calle y charlando. Solo tengo que preguntar una vez para que se movilice una cadena de intermediarios que me conduce hasta quien puede proporcionarme alojamiento: un cuarto junto a un campo de fútbol desde el que puedo ver el partido.
Horas después volví a encontrar al mismo grupo de jóvenes sentados y charlando en el mismo sitio, así que me uní a ellos. Es muy común el describir la vida africana como muy social, muy de calle, pero es que no les queda otra, si no hay electricidad durante el día la casa se queda a oscuras, y si no hay trabajo ni nada que hacer a los jóvenes solo les queda salir a la calle, sentarse y charlar. No hay trabajo para casi nadie, y los jóvenes se aburren sentados en la calle, charlando. Es una imagen triste.

El chico que me dio el cuarto trabaja en la emisora de radio local, "RADIO MANSI", y vino a buscarme en la noche para mostrármela. Una vez allí me propuso improvisar una pequeña entrevista. Preguntas en portugués, respuestas en español..."Tenemos aquí a un amigo español que lleva tres meses recorriendo África en bicicleta..."

Hormiguero

29-12-2007: MANSOA-BAFATA (90 km)

Bafata recuerda a Bissao, un bonito centro colonial en ruinas y un nuevo centro con todo el movimiento y el comercio. Es la segunda ciudad del país, lo cual significa absolutamente nada, pero es el sitio que me ha tocado para pasar la noche vieja. Un tanto extraña. Marcin (que llegó un día después que yo aquí), un amigo de Bafata y yo fuimos a tomar unas cervezas a un bar. Las doce de la noche llegaron y nadie notó la diferencia. Poco después la luz de toda la ciudad se fue al garete y la fiesta se terminó.
No luz, no música, no fiesta...es ¡Guinea Bissao!