jueves, 17 de enero de 2008

KM 6104: LABE

1-1-2008: BAFATA-GABU (55 km)

El tamaño de la resaca del día uno fue proporcional al éxito de la fiesta de noche vieja, así que no me supuso un gran problema levantarme temprano y preparar todo para continuar el viaje hacia Gabu (¡la tercera ciudad mas grande de Guinea Bissao!).
La noche vieja fue un fracaso por dos razones. Primero porque la botella de alcohol que había traido Marcin para la ocasión desde la isla de Bubaque (al sur de Bissao) nos la bebimos la noche del 30, y segundo porque en lugar de preparar la fiesta dedicamos la tarde del 31 a recorrer las tiendas de Bafata en busca de la bicicleta menos mala de la ciudad. De algún modo Marcin creyó mis mentiras y se tragó que la mejor manera de llegar a Bamako (a 1300 km de distancia) era pedaleando.
Así que año nuevo compañero de bici nuevo.
La primera cosa que aprendimos en el nuevo año es que la bicicleta menos mala de Bafata habría hecho mejor quedándose en Bafata. Marcin pinchó tres veces durante los primeros 7 kilómetros de recorrido porque los radios de la rueda de atrás habían sido apretados en exceso y presionaban la recámara. La solución que encontramos fue cubrir de cinta aislante el interior de la llanta y aflojar de forma provisional los radios que peor estaban, de modo que Marcin pudiese llegar hasta Gabu (con la rueda de atrás haciendo eses)

2-1-2008: GABU-KOUNDARA (113 km)

Desde Gabu hasta la frontera de Guinea Bissao con Guinea Conakry la carretera parece una broma pesada. Hay un millón de agujeros que nos obligan a zigzagear y frenar cada pocos segundos durante unos 80 kilómetros. Al llegar a Guinea Conakry la cosa cambia a peor, la carretera de los agujeros se transforma en una pista con tramos de arena en los que no queda mas remedio que bajarse de la bici a empujar.
Durante este día la bici de Marcin se portó relativamente bien, y solo se le puede reprochar que se le partieran los dos pedales a unos 20 kilómetros del final.
A Koundara Marcin llego destrozado, al igual que su bici, así que decidimos quedarnos un día para reparar daños y recuperar fuerzas, pues intuíamos que los próximos días serian los mas difíciles.




4, 5, 6-1-2008: KOUNDARA-LABE (262 km en 3 dias)

Uno de los tramos mas difíciles desde que empecé el viaje en Valencia. Nada de carretera en todo el recorrido, montañas que nos hacen subir y bajar sin descanso, apenas sitios donde conseguir comida y nubes de polvo que nos regala cada coche o camión que pasa a nuestro lado. Está claro que Marcin no ha elegido ni la mejor bici ni el mejor momento para unirse al viaje.
El primer día conseguimos llegar de noche a un pequeño pueblo que hay sobre la pista a la altura del cruce de Goual. Allí preguntando encontré a un hombre que nos ofreció una de las habitaciones de su casa para colocar nuestras esterillas y dormir.
El segundo día, tras completar la distancia mínima que habíamos acordado me quedé junto a la pista para esperar a Marcin. Empezaba a oscurecer así que monté la tienda de campaña y empecé a juntar algo de leña para hacer un fuego y preparar una sopa, pero Marcin no llegaba. Esperando conocí a unos jóvenes que me dijeron que no tenía que dormir en la tienda, que podía ir con ellos a su poblado, "el poblado de un Imán". Les dije que debía esperar junto a la pista la llegada de mi amigo, así que se quedaron a esperar conmigo. La oscuridad se hizo total, y cuando yo ya empezaba a temerme lo peor llegó un gran camión levantando una gran nube de polvo con Marcin y su bicicleta arriba del remolque. Marcin me contó que había sido derrotado por las montañas y que en un momento dado se tumbó junto a la pista para dormir, pues no podía seguir un kilómetro más, pero que al escuchar la llegada del camión usó sus últimas fuerzas para hacerse ver y pedir ayuda.
Una vez en el poblado del Imán fuimos llevados a una habitación donde el jefe del lugar se hayaba reunido resolviendo ciertos asuntos. Nos mandaron sentar y esperar. El jefe del poblado se mostró indiferente ante nuestra presencia y en algún momento ordenó que se nos proporcionase alojamiento y café (llegamos tarde y la comida se les había acabado). Esto se hizo al instante, para nuestro alivio, pues estábamos apunto de quedar dormidos allí mismo, ante el jefe del poblado.


Al día siguiente yo salí disparado como una flecha para terminar cuanto antes con este tramo tan difícil, necesitaba llegar cuanto antes a Labe y descansar. El recorrido fue de casi 80 kilómetros y aun mas difícil que el día anterior, así que a medida que avanzaba entre las montañas me convencía de que Marcin no sería capaz de llegar en un solo día....Cuando llegué a Labe mi cuerpo, mi equipaje y mi bici estábamos completamente cubiertos de polvo de la pista. Mis labios agrietados y la piel de mi cara y manos irritada por el sudor y el polvo. Mi imagen en el espejo me impactó, pero ya estaba hecho.
En cuanto a Marcin completó unos 25 kilómetros hasta que el portaequipajes de su bici se partió por la mitad, momento en que paró un camión y se dejó llevar.
¡Esto es lo que yo llamo vacaciones!

1 comentario:

Anónimo dijo...

Juanan, Juanan, Juanannnn....
Que malohas sido con el pobre Marcin. Convencerle de que se comprara una bicicleta de "Plástico". Así como no va a pinhar o romperse? Ñejñej.
Bueno, si, vaya put*** lo de su bici, suerte de los camioneros, que si noooo.... :)

Ya veo que se está poniendo la cosa dificil en cuanto a orografía y caminos. Pero no es lo que buscabas?

Hace unos dias, Juanjo y yo fuimos con la bici (tras meses sin haberla cogido) un dia de bastante viento y acabamos reventados. Así que decidimos, que si no la cogemos más, cuando vuelvas del viaje, no vamos a acompañarte en ninguna miniruta biciclera. No queremos ser humillados. :)